Embalajes para exportación: requisitos, tipos y consideraciones

La globalización ha hecho que, hoy en día, cualquier persona pueda vender productos en cualquier lugar del mundo. Sin embargo, para poder hacerlo con garantías, es necesario usar los embalajes para exportación adecuados, los cuales tienen la misión de proteger la mercancía y de garantizar que llegue al cliente en perfecto estado.

Por ello, en Cartonajes Malagueños queremos hablar en profundidad acerca del embalaje de exportación. Si quieres que tu ecommerce empiece a operar a nivel internacional, no te lo pierdas.

Normas de embalaje para exportación

Los embalajes para exportación deben cumplir con una serie de requisitos pensados para proteger el medioambiente y la salud de los consumidores. La mayoría de ellos aparecen tipificados en la Directiva 94/62/CE de la Unión Europea, que hace referencia a todos los productos fabricados con materiales destinados a contener, proteger y presentar mercancías, desde su producción hasta su entrega al usuario final.

Esta regulación hace referencia tanto a los envases retornables como a aquellos de un solo uso, abarcando productos industriales, comerciales y domésticos. Por su parte, las importaciones de embalajes fabricados con madera u otros productos vegetales están sujetas a medidas fitosanitarias adicionales establecidas en la Directiva 2000/29/CE, que buscan prevenir la propagación de plagas y garantizar la seguridad fitosanitaria.

Requisitos que debe cumplir el embalaje para exportar

Las directivas anteriores establecen una serie de requisitos de obligado cumplimiento respecto al embalaje de exportación. Estos son los más importantes:

  • Minimizar el impacto medioambiental. Para ello, es necesario que sean reciclables y que reduzcan al mínimo los residuos.
  • Contar con las etiquetas adecuadas que indiquen los materiales empleados y que faciliten su clasificación y reciclaje.
  • Respetar los límites de concentración de metales pesados, como es el caso del plomo, el mercurio, el cadmio o el cromo hexavalente (100 ppm).
  • Ajustarse a las medidas específicas que favorezcan un uso eficiente de los materiales y optimicen el almacenamiento y el transporte.
  • Si contiene alimentos, debe asegurar que no se transfieran sustancias nocivas a los productos.
  • Si el paletizado o el envase es de madera o de cualquier derivado vegetal, ha de lucir el sello fitosanitario que garantice que el material es apto para la exportación.

Tipos de embalajes para exportación

Dependiendo de la función y del nivel de interacción con el producto que vaya a tener el embalaje de exportación, podemos fijar tres categorías.

Embalaje primario

El embalaje primario es el tipo de embalaje que tiene contacto directo con el producto que contiene, como sería el caso de una botella de vidrio o de plástico o de una lata de refresco. Su objetivo principal es proteger la mercancía y, simultáneamente, llamar la atención del consumidor y satisfacer sus necesidades de almacenamiento en el hogar. Por ello, las marcas suelen usarlo como parte de sus estrategias de marketing y para incluir mensajes publicitarios.

Embalaje secundario

Aquí hablamos de un tipo de embalaje que se utiliza para agrupar dos o más unidades de un mismo producto que ya cuentan con un embalaje primario. Su principal propósito es facilitar el almacenaje y el transporte por parte del operador logístico. También tienen la misión de añadir una dosis extra de protección a los productos durante su traslado.

Embalaje terciario

El embalaje terciario sirve para gestionar de manera eficiente grandes volúmenes de productos, agrupando varios embalajes secundarios. Generalmente, está preparado para soportar cargas pesadas y admite el apilamiento, lo que es fundamental para optimizar el espacio en almacenes durante largos períodos de tiempo y para recorrer largas distancias en barco o camión.

Cómo preparar tu producto para una exportación segura

Para afrontar el proceso de exportación de tus productos con garantías, es indispensable que tengas en cuenta todos estos aspectos:

  • Utiliza embalajes resistentes que se ajusten al tipo de producto y que cumplan con las normativas internacionales.
  • Si es necesario, introduce materiales protectores como plástico de burbujas, espuma o rellenos para evitar daños.
  • Asegúrate de que los productos estén correctamente fijados dentro del embalaje para minimizar el movimiento durante el transporte.
  • Considera la utilización de embalajes impermeables para proteger la mercancía de la humedad y otros factores climáticos.
  • Prepara de antemano todos los documentos relacionados con la exportación (aranceles, descripciones, etc.) para evitar posibles retrasos en la aduana.
  • Realiza etiquetas que expongan la información de la manera más clara posible.
  • Emplea sistemas de seguimiento en tiempo real para saber en todo momento dónde está tu mercancía.

Dicho esto, ya tienes en tu poder toda la información que necesitas sobre los embalajes para exportación. Ya solo te queda ponerte en contacto con Cartonajes Malagueños para que te ayudemos a encontrar las mejores soluciones para las necesidades específicas de tu negocio.

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