Logística verde o ambiental: qué es y cuáles son sus ventajas

Los procesos logísticos que llevan a cabo muchas empresas tienen un impacto negativo en el medioambiente. Principalmente, derivado de la emisión de gases de efecto invernadero, como es el caso del dióxido de carbono. Se estima que estas compañías generan alrededor del 10 % de las emisiones totales que afectan al incremento de la temperatura terrestre.

Por ello, no es de extrañar que la logística ambiental haya pasado a formar parte de las políticas corporativas de la mayoría de empresas del sector. Pero, ¿qué es exactamente y qué implicaciones tiene? ¡Quédate para descubrirlo!

¿Qué es la logística verde o ambiental?

La logística verde es un conjunto de medios, métodos y procedimientos respetuosos con el medioambiente destinados al transporte, almacenamiento, empaquetado y distribución de productos. Su objetivo primordial es reducir el impacto que estas acciones tienen sobre el entorno.

Características de la logística verde

Suele decirse que los procesos logísticos se fundamentan en 4 pilares: el transporte, la distribución, el empaquetamiento y el almacenaje. Pues bien, estos son también los elementos que caracterizan a la logística verde, solo que desde una perspectiva diferente a la tradicional. Vamos a verlos:

• Transporte verde. Antes dijimos que el 10 % del total de emisiones de gases de efecto invernadero a nivel mundial las realizan las empresas logísticas. Pues bien, de esa cifra, el 75 % corresponde al uso de camiones y furgonetas con motores de combustión interna. La logística verde o ambiental trabaja por reducirlas todo lo posible sin perjuicio en la calidad de los servicios ofrecidos por la empresa.
• Packaging verde. El uso de envases sostenibles es otro aspecto clave. Es cierto que cada vez el plástico tiene un peso menor en la industria, pero todavía es muy importante. Reducirlo en la medida de lo posible y apostar por soluciones más respetuosas con el entorno como el packaging de cartón resulta de vital importancia. Es más, incluso los tradicionales palés de madera pueden ser cambiados por otros fabricados en este material en muchos casos.
• Distribución verde. Aquí juega un papel clave la optimización de las rutas de distribución, así como el aprovechamiento máximo del espacio de almacenamiento disponible en el medio de transporte elegido.
• Almacenaje verde. Acondicionar las infraestructuras necesarias para el almacenamiento de los productos también es clave para reducir las emisiones. No olvidemos que en ellas también se generan emisiones derivadas del uso energía eléctrica, carretillas y elevadores, etc.

Soluciones para conseguir una logística más verde

Como es obvio, modificar dichos procesos con el propósito de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero requiere una profunda transformación de las estructuras organizativas y de las estrategias puestas en práctica.

Además, todo ello debe hacerse sin perjuicio de la viabilidad del negocio ni de la satisfacción de las necesidades de los usuarios. Sin duda, un enorme desafío para los principales actores del sector, sobre todo, porque los beneficios son más notables a medio y largo plazo que a corto.

Por suerte, hay una serie de soluciones que se pueden poner en práctica para conseguir una logística más verde. Unas requieren una inversión elevada, mientras que otras no tanta. Son las siguientes:

• El cartón debe convertirse en el material de trabajo más importante. Tanto en lo que respecta al embalaje primario y secundario de productos  como a los palés en sí mismos. Es muchísimo más ecológico y respetuoso con el medioambiente que la madera y, sobre todo, el plástico.
• Renovación de la flota de vehículos profesionales. Especialmente, apostando por modelos equipados con motores híbridos o eléctricos que sustituyan a los de combustión interna.
• Optimización de las rutas y de los horarios. Planificar los trayectos eligiendo aquellas carreteras con menor densidad de tráfico puede suponer un ahorro energético de hasta el 30 % para las empresas logísticas. Sin embargo, no solo implica una reducción de los costes operativos, sino también un menor volumen de emisiones.
• Colocación de placas solares en el almacén. Estos paneles te permitirán disfrutar de energía renovable con la que alimentar el sistema de iluminación y cualquier dispositivo electrónico dentro de tu centro logístico. Si se encuentra en un lugar con muchos días de sol, puedes reducir fácilmente hasta el 30 % de lo que gastas en electricidad mensualmente.
• Instalación de sistemas de climatización más eficientes que el aire acondicionado. Es el caso, por ejemplo, de los equipos evaporativos o adiabáticos. Su funcionamiento tiene un impacto casi nulo, ya que funcionan a partir de un principio natural como es la primera ley de la termodinámica. Además, consumen hasta un 80 % menos de energía.

A todo esto hay que sumar el reciclaje y, cuando sea posible, la reutilización. No podemos obviar que los procesos logísticos generan una cantidad bastante considerable de residuos, tanto de plástico como de cartón o madera.

Por suerte, a la mayoría de estos materiales se les puede dar una segunda vida útil. En caso de que no sea así, hay que apostar siempre por embalajes de materiales biodegradables. Por ejemplo, el cartón se descompone en la naturaleza en aproximadamente un año, mientras que el plástico puede tardar miles.

Ventajas de implementar la logística verde

Implementar las soluciones de logística verde que acabamos de citar conlleva una serie de beneficios incuestionables para las empresas. Estos son los más importantes:

• Reducción de los costes operativos. Poner en práctica estas acciones supondrá una reducción de los residuos generados, menor consumo de combustible por parte de los vehículos de las flotas profesionales y mayor eficiencia energética en los almacenes. Por tanto, no son sólo beneficiosas para el medioambiente, sino también para tu bolsillo.
• Ventaja competitiva. Los consumidores valoran especialmente a todas aquellas empresas que se preocupan por el medioambiente y ponen en práctica soluciones destinadas a minimizar su huella de carbono. Eso sí, cada vez son más conscientes del greenwashing llevado a cabo por algunas corporaciones, por lo que las acciones deben ser reales y no una mera estrategia de marketing. Solo así será posible conseguir una posición predominante en el mercado.
• Mejora de la imagen corporativa. La logística ambiental debe estar perfectamente implementada en la estrategia de responsabilidad social corporativa. Gracias a ella, transmitirás a tus usuarios y al conjunto de la sociedad que quieres devolverle parte de los resultados de tu actividad económica.

Ya que hemos hablado de la sociedad en general, no podemos obviar que ella en su conjunto también se beneficiará de tu apuesta por la logística verde. Pero ¿cómo exactamente? En concreto, de las siguientes formas:

• Menos tráfico. La optimización de las rutas y los horarios se traducirá inevitablemente en una menor saturación de las carreteras, lo que evitará atascos y situaciones de circulación lenta en autovías, autopistas, carreteras nacionales y cascos urbanos.
• Reducción de la contaminación acústica. El tráfico rodado es uno de los grandes culpables de la contaminación acústica que sufren los habitantes de las grandes ciudades y sus alrededores. Por tanto, optimizar las rutas y los horarios también supone una disminución en la emisión de ruidos y, por tanto, un mayor bienestar para las personas.
• Mejora de la calidad del aire. La contaminación está detrás de multitud de enfermedades y afecciones respiratorias. Reducir el tráfico y las emisiones de gases contaminantes también conlleva una mejora de la calidad del aire que respiramos y, por tanto, más posibilidades de disfrutar de una buena salud.

En definitiva, la logística verde es una apuesta segura para cualquier empresa del sector. Desde nuestra fábrica de cajas de cartón en Málaga ponemos al alcance de tu mano las mejores soluciones de embalaje de cartón para que puedas empezar a implementarla en tu negocio. Sin duda, el material más sostenible y respetuoso con el medioambiente.

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