Materiales biodegradables: que son, ventajas y ejemplos
En mayor o menor medida, todos estamos acostumbrados a oír hablar de los materiales biodegradables. Sin embargo, no siempre tenemos claro qué son exactamente, ya que se trata de un concepto más complejo de lo que parece a simple vista. Este es el motivo por el que en Cartonajes Malagueños hemos decidido explicar qué son los materiales biodegradables, en qué se diferencian de los no biodegradables y cuáles son sus ventajas. Además, te ofreceremos algunos ejemplos para que lo tengas todavía más claro.
¿Qué significa “biodegradable”?
La biodegradabilidad es un término que se utiliza para definir a todos aquellos materiales que, mediante la acción de determinados microorganismos, pueden descomponerse en sustancias más simples que la original. Además, sin causar impacto negativo alguno al medioambiente.
Diferencias entre biodegradable y no biodegradable
Una vez definido el concepto de “biodegradable”, debemos añadir que, para que un material reciba esta consideración, es necesario que se descomponga del modo descrito anteriormente sin dejar residuos tóxicos. Es decir, elementos químicos que puedan causar contaminación o acumulaciones de basura que afecten a los ecosistemas.
Como es obvio, un material no biodegradable es aquel que no puede descomponerse mediante la acción biológica de los citados microorganismos o que, de hacerlo, liberan agentes contaminantes para el medioambiente. Aunque los derivados del petróleo suelen entrar en esta categoría, lo cierto es que existe cierta biodegradabilidad del plástico que se debe tener en cuenta. Sobre todo, teniendo en cuenta su relevancia en la industria logística.
¿Qué son los materiales biodegradables?
Los materiales biodegradables son aquellos que pueden descomponerse mediante mecanismos biológicos. Por ejemplo, por la acción de determinados microorganismos, como pueden ser ciertos hongos o bacterias. Estos diminutos seres vivos transforman el material en nutrientes, biomasa, agua y dióxido de carbono, de modo que tienen un impacto positivo para el medioambiente.
Para que un material se considere biodegradable, es necesario que pueda descomponerse mediante la acción de agentes naturales biológicos hasta en un 90 % en un lapso de tiempo igual o inferior a 6 meses. El resultado debe ser, mayoritariamente, agua y dióxido de carbono.
Ventajas de los materiales biodegradables
Los materiales y productos biodegradables, como es el caso de las cajas de cartón, ofrecen una serie de ventajas incuestionables:
- No generan residuos: es decir, una vez sometidos al proceso de degradación, ya sea por vía natural o artificial, no queda ni rastro de ellos. De este modo, no generan ningún impacto negativo al entorno.
- Pueden reciclarse: según el material del que estemos hablando, será posible utilizarlo para fabricar otros objetos o, en su defecto, será empleado como compost. En cualquier caso, siempre tendrán una segunda vida útil.
- Reducen la huella de carbono: dichos materiales no liberan sustancias tóxicas a la atmósfera, de modo que no fomentan el efecto invernadero ni perjudican a los ecosistemas terrestres y marinos. Además, no es necesario incinerarlos. Una práctica que, desgraciadamente, sigue practicándose en muchos vertederos.
Ahora bien, la industria del packaging todavía se enfrenta a algunos desafíos importantes en este sentido. Por ejemplo, hay materiales biodegradables que no acaban en los sistemas adecuados de reciclaje o compostaje. Además, para llevar a cabo el proceso de forma artificial, a veces es necesario emplear una gran cantidad de energía.
Ejemplos de materiales biodegradables
Una de las propiedades más importantes del cartón y el papel es la biodegradabilidad. Sin embargo, no son los únicos materiales usados en la industria del embalaje que poseen esta cualidad. También podemos citar la madera de los palés o el serrín destinado a proteger el producto frente a posibles golpes.
Ejemplos de materiales no biodegradables
Del mismo modo, en la industria del packaging siguen usándose muchos materiales no biodegradables. Es el caso, por ejemplo, de las latas de aluminio, de las botellas de vidrio o de los envases de plástico. Es cierto que se pueden reciclar y que eso reduce su impacto en el medioambiente, pero no se descomponen de forma natural.
La importancia de elegir materiales biodegradables
Llegados a este punto, salta a la vista la importancia que tiene apostar por materiales biodegradables a la hora de diseñar el packaging de los productos. Sin duda, se trata de una medida que protege el medioambiente y que, además, ayuda a reducir costes y a generar una mejor imagen entre los clientes.
En Cartonajes Malagueños somos especialistas en la fabricación de cajas de cartón para todo tipo de productos. Un material biodegradable capaz de proteger perfectamente tus productos durante toda la cadena logística hasta llegar a tus clientes. Ponte en contacto con nosotros y te asesoraremos en todo lo que precises. ¡No esperes más!